Película: Memento

Director: Christopher Nolan.

Duración: 113 min.

Protagonizada por Guy Pierce (como Leonard), Carrie-Anne Moss (como Natalie), Joe Pantoliano (como Teddy), Mark Boone Junior (como Burt) y Stephen Tobolowsky (como Sammy).

Este thriller psicológico del año 2000 es una de las primeras películas de este famoso director que este verano estrena 'Dunkirk', su nuevo proyecto ambientado en la Segunda Guerra Mundial. A pesar de no ser una de las cintas más conocidas de la filmografía de Nolan (director de El caballero oscuro, Origen e Interstellar), recibió una gran aceptación por parte de la crítica especializada y estuvo nominada al Óscar al mejor guión original y al Óscar al mejor montaje.

El guión de esta película está basado en el relato 'Memento Mori' de Jonathan Nolan, hermano pequeño de Christopher y director de la exitosa serie 'Westworld'.


Leonard Shelby es un trabajador de una agencia de seguros que sufre un evento muy traumático en su vida y a partir de entonces es incapaz de formar recuerdos a corto plazo. Lo último que recuerda desde ese momento es la muerte de su mujer y por ello su único objetivo es encontrar a la persona que la asesinó.  Debido a su problema de memoria, Lenny tendrá que recurrir a tatuajes, fotografías y un método muy singular que le permita perpetrar su venganza.

Lo más característico de esta película es que está contada de adelante hacia atrás, es decir, comienza con una escena en la que Lenny mata a un hombre pero no se sabe con certeza si ese es el asesino de su mujer ni cómo ha llegado el protagonista a esa conclusión. Además, estas escenas que cuentan la historia en sentido inverso se intercalan con otras en blanco y negro que explican la enfermedad del protagonista y otro caso similar que él conoce de primera mano. Debido a esta estructura tan particular, cada escena es una pieza del puzzle que el espectador tiene que completar.

Por otro lado, la historia está contada siempre desde la perspectiva del protagonista. Esto significa que a veces no se sabe si los otros personajes están mintiendo o tratan de ayudar a Lenny. Las únicas herramientas de las que dispone el público son los tatuajes y las notas del personaje principal, por lo que siempre impera un desconcierto generalizado y el suspense se mantiene hasta el final.

El hecho de que la historia esté contada desde el punto de vista del protagonista también implica que Guy Pearce (el actor principal) aparezca en todas las escenas, por lo que desempeña un papel exigente en el que cumple a la perfección.


En definitiva, es un thriller con un montaje muy original por estar planteado de una forma tan interesante y está muy recomendado a los amantes del suspense y de las películas con argumentos enrevesados.


Valoración de Íñigo: 8,5/10

Valoración de Julia: 8/10